Mis noches de insomnio suelen tener tintes de terror. A oscuras, mi mente se vuelve loca y me juega malas pasadas. Anoche, mientras trataba de conciliar el sueño alguien se paró en una esquina de mi habitación y gritó mi nombre… era una voz masculina, metálica, y que produjo eco. Pegué un brinco. La respiración contenida y el ritmo cardiaco acelerado me permitieron ver su silueta. Me costó unos minutos entender que no había nadie, que no era un llamado de ultratumba, que nadie suplicaba mi ayuda, que mi subconsciente, una vez más, me había jugado una broma.
sábado, 26 de mayo de 2007
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3 comentarios:
Reina cada vez que veas tus peliculas o series de terro prepara tu memoria diciendo esto es de la imaginación de un sujeto y asi evitarás que se reviva en el sueño. Por supuesto que la redacción es buenísima.
OBVIAMENTE SE TRATA DE TU FIEL ANGEL DE LA GUARDA...¡DESPREOCÚPATE...!
Lupita: ya ponte a trabajar, no seas flojita... tus tres escritos ya me los sé de memoria... ¡Enten...!
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