jueves, 26 de octubre de 2006

RECONOCIMIENTO I

Cleopatra salió de la tina donde había tomado su baño matutino acostumbrado; mezcla de miel de abeja con sangre de cisne, aleados con una pluma de fénix. Sintió su piel rejuvenecida. Observó atentamente el reflejo de su desnudez en el espejo. Más que belleza física poseo inteligencia física. Soy perfecta.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Ojala todas las mujeres imitarran a Cleopatra no solo debe preocupar el aspecto exterior se debe demostrar la inteligencia porque alimenandose sanamente se desarrolla la salud que se nota en la piel. Aunque no se puede comprobar que ella usaba esos tratamientos de belleza o no reina.

Antígona dijo...

Llámalo "licencia literaria", realmente sólo tomé prestado el nombre por el significado histórico.