miércoles, 31 de octubre de 2007

COTIDIANAS

Y es que lo cotidiano mata musas... he estado tan ocupada que no tengo tengo tiempo ni de leer, ni de escribir, ni de pensar, ni de quejarme por mi próximo cumpleaños... irónicamente fue la razón por la que inicié este blog... y hasta hace unos quince minutos me di cuenta de que mi primer aniversario pasó de noche, como un avioncito que no hace ruido... o quizá, simplemente me he resignado a que los días son siempre iguales...

jueves, 25 de octubre de 2007

ALUMNOS

Hoy, uno de mis tantos alumnos, me preguntaba si ser profesor era difícil. Mi respuesta fue automática: SÍ. Y es que se necesita algo más que vocación; es un trabajo en el que siempre serás culpable, y habrá momentos en los que desees fulminar con la mirada a todo el grupo. Y al mismo tiempo, no puedo evitar sentirme un poquito importante sólo porque puedo caminar por un plantel educativo donde muchos exalumnos corren a saludarme.

sábado, 13 de octubre de 2007

UAG - JUEVES

- Sí, todos los doce de octubre camino con mis papás y mis hermanos y mis tías desde mi casa hasta la Basílica de Zapopan para ver a la virgencita. Bueno, no mi papá, a él le da flojera así que se va en el carro... nos espera allá y ya él nos trae a la casa... lo que cuenta es que va...
- El vestido que quiero cuesta como $8000 y mis papás jamás me los darían... pero ya sé a quién se los puedo sacar...
- No quería entrar a esa madre (la sociedad de alumnos) pero me dijeron que me justificarían todas las faltas... así que...
- Profe, disculpe porque la pregunta no tiene nada qué ver con su materia, pero es cierto que los aztecas hablaban náhuatl, porque eso es lo que dice el profe pero no le creí... ¿en serio? ¿náhuatl? o sea que todas las palabras raras que nos pone es náhuatl... ¡guau! ¿dónde aprendió a hablar náhuatl?
- Deberían ir a ver al santito que está en la vidriera, ¡n'ombre!, muy milagro$$$$o...
- Entonces mi papá me dijo que fuera menos a la casa... que porque estoy gastando mucho dinero y que al cabo no estoy lejos, soy de Tepic, así que le dije que estaba bien si de todas formas me daba el dinero del pasaje... está bien... no los veré cada fin de semana pero tendré 300 extra a la semana...
- Y entonces ese güey le dijo al otro güey que yo me besuqueaba con todo el mundo... está idiota, bueno, ayer besé a tres pero era broma, es decir, estábamos jugando, qué derecho tiene de decir que besuqueo a todos, así que ahora todo el mundo me está invitando a salir, cómo voy a saber que es porque quieren salir conmigo o porque soy una fácil... pero me las va a pagar, voy a decirle a todo el mundo que es joto para que vea lo que se siente... y aparte, le voy a dejar de hablar...
- ¿...el bones es bueno? Me dijeron que sabe como a caribe, pero yo me puse una con caribes que en cuanto me llega el aroma corro a vomitar...
- Disculpa, ¿ya tienes un telcel?... ¿Un queeeeeé? ¡Ah!, ¿un celular? sí ya...
- Profe, ¿no fue a la conferencia? Fue sobre Iturbide. Estaba tan aburrida que el mismo fulano parecía estarnos mentando la madre por tener que hablar sobre él...

jueves, 4 de octubre de 2007

MÚSICA

Recuerdo cuando se pusieron de moda los walkman. Eran enormes, pesados, poco prácticos... de cassette, por supuesto. Yo tuve uno, no sé si mi padre o Santa Claus pero uno de los dos me lo regaló. Después con la arremetida del CD, llegó el discman. A éste no le seguí los pasos. Hacía ya bastante tiempo que me había dejado de interesar la música contando secretos en mis oídos. Además de que me producían una especie de ronroneo que no desaparecía sino hasta verios días después. Mi hermano me regaló un MP3-player, que por cierto olvidé en Guaymas la última vez que visité aquellos lares. Gracias a ellos, estuve a punto de morir, varias veces, entre las llantas de un carro. Me involucraba tanto en la música que simplemente no escuchaba el motor de los coches anunciándome su presencia inminente. Tanto el walkman como el MP3-player tenían la curiosa cualidad de producime una cara de idiota debido a la gesticulación en la que caía por seguir las insulsas letras de la música pop. El I-pod está ya muy lejos de interesarme. Pero no es eso lo que llamó mi atención hoy por la tarde. Acudí a Plaza Galerías a cortarme el pelo. Y me atravecé con lo que parece ser la nueva moda de música "portable". De tres a seis jóvenes adultos, en "bola", compartiendo tiempo y espacio, y cada uno con su propia música. No. No con audífonos. La música está lo suficientemente alta como para que lo escuchen ellos y el resto de los inocentes individuos que atinamos a pasar a su lado. En conclusión, hemos alcanzado nuevos niveles de contaminación auditiva: rebasamos a los negocios con sus sonidos, los automóviles con sus bocinas, y llegamos al nivel individual, donde cada quien traerá incorporado algún dispositivo que le permitirá escuchar, en vivo y a todo volumen, la música de su preferencia, lo cual por supuesto no es sino un método moderno de tortura para el resto, y por resto quiero decir para mí.